martes, 18 de agosto de 2009

Performance: El alma es solo un garabato


(escombros. una mandrágora gigante. mariposas amarillas llenan el aire.)

El artefacto obscuro juega al equilibrista en la copa de la mandrágora.
Irrumpe textos como gas mostaza. Degrada.

Lulú sumerge su rostro en un frasco de channel n5.
construye en el suelo un pequeño manicomio con trozos de obsidiana,
de nubes de ruido que ígneas bajan.
Utiliza de pacientes a las hormigas que de entre las piedras recoge.

Adrian lee un libro parcialmente quemado, texto que el artefacto le proporciona:
letras al revés, números al revés,
nenúfares que el caos dibuja llenos de electricidad.

Lulú toma tramal y 50 mg de diazepan con mermelada.
Aparta las mariposas que se agalopan en sus ojos y saca un frasco de arsénico de su bolsillo.

Atrás se ve una explosión nuclear en blanco y negro.
El artefacto obscuro dice: "Todo ángel es una bomba".

Lulú hace malabares con el frasco de perfume y con el de arsénico.
No se diferencian uno de otro.
Se detiene y le ofrece a Adrian el frasco que tiene en la mano derecha.
Las mariposas se adhieren a su vestido azul.

De los escombros surge una máquina de neón que, afilada, se abre como una flor.

Adrian observa el frasco que Lulú le tiende y dice:
"Dios detona al otro lado de los espejos".
Transpira.

La máquina de neón llena de luces el pequeño manicomio.

El artefacto obscuro pierde el equilibrio y cae sobre los escombros.
Estos se tornan en papel. Las mariposas en papel. La mándrágora en papel.

El escenario se desploma cual glaciares.