Lejos del oásis

De primitivas, rojas tierras que en su poesía llevan

cortas rutas hacia la nada

y en su drástica pasión

despertando.

Y fantásticos, rojos abismos perpetrados

perdidos en sus arenas

como navíos en la tormenta,

perpetuos

y sin salida

pero siempre anclados

a la poesía de estas rojas tierras.

Luzbel

De su carne que angustia,

vistiendo de hecatombes

toda salida

y elegante se derrumba

la pureza de su senda

sobre costas impías

mientras ausente su alma en acuarelas

decreta los vaivenes

de la tierra y las bestias.

Sus números estan en toda silueta...

Sed

No me importa destruir

mientras a mis pies se abra

de ópalo el mar indómito

confundiéndose con las calles heladas,

los impolutos burdeles

y el espíritu disonante.

Es una nueva clase de sed,

la gramática de la mentira

que, veloz,

golpéa la garganta.

De deseos y vértigo

el esplendoroso azul vértigo,

visceral en nuevo cielo,

maníaco en sus vastos pétalos,

que se abre fértil al fin y al cabo

a febriles ríos oscuros,

a abstrusos deseos carnales.

Y el esplendoroso azul vértigo,

suavemente tornándose cuarzo

y visceral descubriendo otro firmamento,

llevando a las llamas el murmullo de los rezos,

girando en su centro desnudo

la sombra del deseo.

Intento no marearme.

Arte es resistencia!!!

No creo en el arte político.

Creo mas bien que todo tipo de arte es político porque mediante sus creaciones propone o intenta cambiar el status quo de todas las cosas, quiere hacer bella una realidad que no la es, quiere generar una revolución en los sentidos, en la mente y en los sentimientos.

Hacer arte ya es una posición política beligrante, combativa:

es estar descontento ante la realidad e intentar hacer de ella algo mejor y diferente mediante la belleza

Verbo/magia/los fríos detalles de la telaraña

Escoges un frío detalle de la magia,

durmiendo,

haciendo equilibrio

sobre una piedra

y buscando sus hilos

en la telaraña,

el sonido los tiempla

peligrosos.

Escoges un frío detalle de la magia,

el verbo

que sumerge el universo

en gotas de agua...

El ideal

Durante la niebla

murió siempre

a destiempo,

liviano, en cascadas

y con elegancia surgió

de entre jardines de opio

haciéndose exacto

en unicornios.

¿Acaso podríamos hablar de sus crímenes?

No.

Ya son nuestros.

La sombra del deseo

Escucha los turbios pétalos

que vistes como gotas

en aquellas madrugadas

que cortan como crípticas salvajes

el sereno caos de tus luciérnagas.

Escucha tus pétalos,

el tóxico aire que los atrapa

en tu brutal devenir.

Encontrarás un nombre a tu deseo,

la sombría redención

de un amor ya muerto.

Almas que incendian

Hemos soñado

con aguas infinitas,

aguas que alteran,

madrugadas que envolvemos sutiles,

aguas que incendian.

Es que, tal vez,

no tenemos más fuerzas para seguir...

Sobre la más alta piedra...

en delirio

el aura de secreta, azabache magnolia

sobreviviendo al diluvio,

elevada sobre la más alta piedra

como proscrita tormenta

y enredada

en lascivos aires,

subterráneos decibeles.

Y emite así, casi bella, dormida,

una carta de despedida,

una última cima,

y convierte en una excusa el mañana.

el imperio de los cuerpos

navegamos, una tras otra, densas nubes

como aguas ardientes,

químicos en nuestra belleza frenética

y abriendo ciudades nocturnas, carreteras,

con un solo destello de nuestra violencia

y bajando estrellas a la tierra,

enterrándolas,

visionamos extraños valles,

exquisitos de ébano y lujuria,

extendemos nuestro dominio

a los cuerpos.

Disonantes vírgenes dramáticas

de hermosas disonancias,

mil desconocidas vírgenes dramáticas

que en difuso marfil labraron

nostalgias por otras estrellas

y primaveras que de funcionar dejaron.

Y así mil desconocidas vírgenes,

solitarias cumbres perladas,

como el frío que no podemos abandonar,

el viaje que tememos emprender.

Y son mil desconocidas vírgenes,

talladas en los huesos,

vanagloriándose de nuestras caídas.

Big nothing

Y a la expectativa de toda orilla

y las texturas heridas

como los sueños balbuceantes

rodando escaleras abajo,

vívidos,

vacíos

y enumerando las madrugadas despierto,

el olor a remedios caseros.

Es tan fácil odiar.

La escalera ("un salón en el fondo de un lago")

Subes la escalera hacia el estanque,
irreductible aquel abismo
por la inocencia cortado, interrumpido
como abierto tras colores de coral
y vuelto a las piedras por irresistible locura
como mágica golondrina posada,
vil, milenaria.
Subes la escalera hacia el estanque,
el corazón en la mano
derramando,
y el sonido que impera,
la máquina opaca que espera y espera
los colores de coral
allá arriba
en el estanque.